martes, 14 de abril de 2009

Rapa Nui. Ahu Moai, El Dios Que Quiso Ser De Piedra I



Ahi Inana levantó la cabeza y miró directamente a aquellos ojos grandes, colosales, impertérritos. Llegó corriendo, con la planta de los pies en carne viva, sangrando... Necesitaba postrase sobre sus ancestros, interiorizar sus pensamientos y compartirlos con los de su casta.
Su tez, altiva y espigada se asemejaba a la de sus antepasados. Su torso desnudo, varonil y tostado por el sol, reflejaba las líneas de sus músculos perfectos y armoniosos.
- ‘Atua, a ti te pido, en ti me poso, a ti te doy, en ti me igualo.
- Nanaku, hoy te escucho, hoy te tengo; hoy y mañana hablaremos de nuestra pesca, de cómo Kahi alimenta a nuestros hijos, de nuestros antepasados, de nuestra Haka Tere.
El viento mueve sus cabellos y Ahi Inana, sabe que está preparado para la Aka Venga, para el Haka Naru y para el Haka Pei.
Levantados en su poderío, parados, mirando al interior. Sólidos y duros como rocas de cantera… parece que esbozan una sonrisa por Ahi Inana.
Ya puede partir. Y él recoge una gota de sudor que resbala por su pecho con la que impregna sus labios. Se acerca con el respeto del Honu Potu, con la ternura del Koro, con la sabiduría del Korohua y sella sus labios húmedos con la fría piedra del Ahu….


lunes, 13 de abril de 2009

Rapa Nui, Ahu Moai, El Dios Que Quiso Ser De Piedra II


Ahí Inana cae rodando por la ladera, agarrado a su enemigo. Su lucha por la supervivencia es brutal. Si el buril de sílex lo atraviesa se convertirá en un ser de piedra, como sus antepasados.
¿Alguna vez habéis sentido la afilada hoja de la muerte en vuestra garganta? ¿Alguna vez habéis mirado la guadaña frente a vosotros y sin tapujos?
Cómo puedo ayudarte, Ahí Inana, o mejor diré, cómo puedes socorrerme querido amigo. Dormido en la ladera siento un golpe seco en mi costado. Penetró como alfileres desatados. Y adormilado aún, un fuego se desencadena en mi antebrazo.
Derramando las lágrimas en estas tierras tan apartadas contemplo lo que debió ser esta fiera lucha, la batalla por ser, por verterse en la historia…, ser tan lejano y tan cercano, es la extrema belleza de lo puro y de lo humano.
Make make es tu nombre, es el principio de la creación y Ahí Inana centra y tensa su colosal musculatura para no perder la vida. Con los genes de sus ancestros en la sangre, aquellos que surcaron los mares del Pacífico, que le tengan clemencia es una falacia, lucha o muere Ahí…
Cae rodando con su enemigo por la ladera preguntándose cual ha sido el motivo que les ha llevado a la guerra, cuales han sido los pecados de sus antepasados, cual será el destino de su pueblo.
Hoy me relatas tu existencia, me dijiste que cuidabas de tu jardín, que todo aquello era tuyo, que te sentías orgulloso de tus estatuas, que cazabas y pescabas, que tu morena desnudez era sincera, que tu orgullo era altivo… Sentado frente a tu “padre” de roca viva e impenetrable, susurras el cántico de los Akivis.
Rapa Nui, isla tesoro del mundo, belleza de piedra, cautiva de arcaicos… mi brazo se introduce en tu misterio, y como suelo hacer en mi osadía comparto tus emociones.
Derramando mis lágrimas en esta tierra, impregnando mi cuerpo de tu esencia, volveré a estar a tu lado…
Derramando tus lágrimas en mi antebrazo con tinta desbordada, hoy te llevo empapado, para recuerdo, para ser uno más, para ser un osado………